Evacuar Los Ángeles: esta es mi experiencia al escapar de un incendio.

lo siento en el aire El viento era lo suficientemente fuerte como para derribar un camión de 18 ruedas en Topanga. El humo en mis pulmones fue una advertencia. Nuestro mundo está en llamas Y salimos corriendo. En las noticias vi autos atascados y abandonados mientras la gente huía.

Me he sentido así antes Recuerdo esos momentos finales en marzo de 2020, sintiéndome en control antes de que fuera demasiado tarde. Pero al comienzo del brote estoy corriendo a casa Ahora tengo que buscar refugio fuera de casa. ¿Pero adónde voy? ¿Qué traeré conmigo?

El miércoles, mientras preparaba documentos importantes consultando una guía en línea, las noticias se reproducían de fondo. Se produjo un error porque la conexión eléctrica era inestable. El fuego se ha extendido a lugares cercanos a mí. Cuando está amenazado por el fuego Entonces hice todo lo que pude. Y he llegado a un acuerdo con todas las cosas que no puedo aceptar.

No soy una persona materialista. Pero todavía es imposible imaginar un regreso a las ruinas, las cenizas y los recuerdos de lo que alguna vez fue. Llevo lo que amo conmigo. Cosas que no se pueden reemplazar Lo más importante: mamá, hermano mayor y un diario lleno de recuerdos. Y esos recuerdos volvieron a mí porque mis recuerdos estaban arraigados en Los Ángeles. Mi madre es comediante. Entonces crecí en clubes de comedia de Hollywood. Encontré el amor y mi corazón se rompió en Woodland Hills. Mi primera bebida alcohólica, Sex on the Beach, fue en un restaurante de Malibú. Me crié en la playa y en Hollywood.

Nunca he sido dueño de una casa en Los Ángeles. Nos desplazamos de un lugar a otro. No sé cómo sería tener todos tus recuerdos en una casa. Por otro lado, mis recuerdos zigzaguean por Los Ángeles como la autopista. Y mi Los Ángeles está en llamas El lugar donde quemé mis recuerdos.

Terminé de empacar cosas en el auto. Y mi familia comenzó a viajar hacia el sur. No estábamos seguros de adónde debíamos ir. Pero sé que si continuamos Corremos el riesgo de quedarnos estancados y quedarnos sin tiempo. Se cortó la electricidad en mi tienda. Y las luces de la calle no funcionaban. Estamos atravesando la oscuridad de muchas maneras diferentes. más de una manera El objetivo era conducir hacia el sur, fuera de Los Ángeles, lejos de mi casa. Pero debemos monitorear constantemente los cierres de autopistas. Debido al cierre de muchas autopistas. Intenté ignorar que el mundo tal como lo conocía estaba cambiando. Es una verdad que no quiero aceptar.

mi telefono exploto Mi mejor amiga me dijo que su hermano estaba muy alerta. Planea continuar hacia el sur hasta San Diego. Mi agente huyó a Palm Springs. Nos sentimos incómodos e inseguros. Pero nos dirigimos a Long Beach. cuando lleguemos allí Nos dirigimos al hotel más cercano. Y tenían overbooking. Como la mayoría de los hoteles en Los Ángeles. Después de que un hotel en Long Beach nos ahuyentara Estábamos sentados en el auto. Sin saber a dónde ir después

Decidimos conducir hacia Fullerton. donde encontramos un hotel donde podríamos quedarnos Revisé a todos mis amigos que estaban en otras áreas. afectado Algunos son tercos y no tienen miedo. Algunos están demasiado preocupados. Mi hermano y yo intentamos sumergirnos en la película. Distrayéndonos del desastre cuando todo lo que sabemos podría arder.

Esa noche no pude dormir mientras miraba. alerta fire.ca.gov– todavía incapaz de controlar el fuego Pensé en amigos que ya habían inmigrado y tenían que inmigrar nuevamente. Me preocupa que, aunque estoy tan lejos de las llamas, Nos seguirán. Usé una almohada para protegerme. Trate de crear una sensación de seguridad y paz. Revisé el sitio web compulsivamente. Actualizar y recargar Tuve que rezar para poder dormir. Con la esperanza de que el sentimiento apocalíptico terminara, cuando pasaron las 2 a. m., la preocupación finalmente me agotó. Y me alejo flotando Cuando me desperté el jueves tengo miedo Mi vida es diferente. Y lo sé: tendremos que reconstruir. Revisé el fuego y los encontré todavía ardiendo.

el viernes Mi casa sigue en pie. Pero muchos otros han perdido sus hogares. Este incendio causó más daños que objetos. Esto incluye edificios destruidos en 20.000 acres. Hasta ahora han muerto 10 personas y ¿cuántas están heridas? Nos hemos convertido en parte de los hogares que se quemaron y de las escuelas que perdimos. Los valientes bomberos siguen intentando controlar el incendio que se desató el martes. La calidad del aire sigue siendo muy mala Podría haber más de 50 mil millones de dólares en daños. Miles de personas han sido desplazadas y no tienen un hogar al que regresar. Cuando Los Ángeles deja de arder Nos esperan muchos años de reconstrucción. Desafortunadamente, no puedo evitar preguntarme si esto terminará algún día.

Ahora todavía tengo esperanza. Los residentes de Los Ángeles se unieron para ayudar. Hay muchos refugios y Recursos para ayudar a los afectados– No puedo evitar temer que no quede nada más que esperanza en Los Ángeles después de todo esto. Los Ángeles es mi hogar. Y extrañaré el pasado calcinado que nunca pude visitar.

Akaylah Ellison es una guionista cuya narrativa combina poesía y narración extensa. Creyendo que la empatía es el mayor activo de un escritor, Akaylah crea personajes que hablan de la realidad y alienta a personas de todos los ámbitos de la vida a conectarse emocionalmente con ellos. Akaylah quería crear contenido que reflejara el mundo de su realidad. Es una mezcla de personas de todos los orígenes que viven juntas sin explicar quiénes son y sin disculparse nunca.